viernes, 9 de octubre de 2009

Ecos de Aprendices: "Por la yogourtización"

A veces los colectivos funcionan de manera similar a las personas. Estas, cuando van creciendo en tamaño y sabiduría, suelen padecer periódicas crisis que algunos denominan "adolescencia" y sirven para reordenarse uno mentalmente, readecuarse a las nuevas necesidades de cada sujeto y prepararse para los nuevos retos que le esperan a la vuelta de la esquina.


Por otra parte, y aunque parezca que no tiene nada que ver, lo relaciono estrechamente, nunca he terminado de entender a aquellas parejas que funcionando como tal, se resisten a declararse legalmente, negándose a firmar los papeles necesarios, puro trámite burocrático, para ser consideradas tales, y ser tratadas con los mismos derechos y deberes que las demás. Se niegan a autorreconocerse públicamente, pero no reniegan de las ventajas económicas que eso puede suponer en determinadas circunstancias en la vida.


Y volviendo al inicio del tema, creo que a un colectivo humano como Ikasbloggers, que ha demostrado vitalidad y ganas de hacer cosas, que el paso del tiempo le ha permitido crecer y asentarse como un colectivo que puede aportar mucho en el mundo educativo, le ha llegado el momento en el que tiene que empezar a tomar pequeñas decisiones.


Y llegados a estos momentos, siempre se oyen voces que parecen proclives a mantener esa "organización líquida" que permite que cada uno vaya a su ritmo, se comprometa solo en lo que quiera, cuando quiera y hasta donde quiera, sin mas compromiso que el que quiera asumir en cada momento. No seré yo quien ponga dificultad ninguna a que ese tipo de personas sigan sintiéndose a gusto en las citas periódicas del colectivo.

Pero también es cierto que otras personas pueden aspirar a darle un poco más de cuerpo a una organización abierta y plural, con un deseo fundamental de seguir siéndolo y que sin perder ni un ápice de sus características actuales pueda avanzar un pasito en su autoorganización pasando de "liquida" a "yogourt". Sin sustos, sin prisas, y permitiendo que quienes lo deseen puedan avanzar un pasito dándole cierto empaque a la organización: de agua a yogourt.

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