El Dto. de Educación y los móviles

Una nueva propuesta del Departamento de Educación parece ser que va a promover un interesante debate en las aulas y en el mundo educativo. Visto a media distancia, me parece algo más que razonable y una herramienta imprescindible para los centros educativos con el objetivo de solucionar un problema que se está dando en los mismos y que en esta misma página ya lo había mencionado anteriormente.

El Departamento ha renovado su catálogo de infracciones y castigos para adaptarlo a las necesidades actuales de la escuela. Recoge por primera vez los comportamientos de un alumnado que maneja con destreza las nuevas tecnologías, mucho antes de aprender a dividir. En la propuesta de Decreto de Derechos y Deberes de los Alumnos de la consejería se consideran faltas graves, que pueden dar lugar a la expulsión, las grabaciones con móviles a alumnos y profesores que atenten contra el derecho al honor, la intimidad y la propia imagen, sin la voluntad previamente expresada o sin la autorización de los padres. Manipular documentos de la escuela de soporte informático está calificado también como una acción grave.

Los colegios han detectado infracciones 'tecnológicas' que no recoge el decreto de derechos y deberes en vigor, del año 1994. «Los alumnos utilizan los móviles para copiar en clase. Fotografían el examen, lo mandan por e-mail a su 'cómplice' y les dictan las respuestas o se las envían. Hay móviles muy sofisticados, pequeños, indetectables», comenta una maestra de una escuela alavesa. «Los chavales tienen a su alcance toda la tecnología necesaria para escanear el boletín de notas, cambiar las calificaciones y presentar una copia perfecta en casa, sin que les descubran», añade. Hay pequeños expertos en informática que entran en las web de los centros de enseñanza y se 'bajan' exámenes y documentos privados.

Los móviles han dado pie también a nuevas formas de acoso en la escuela. Se han detectado casos de estudiantes que llevan sus teléfonos a los recintos escolares, graban a sus compañeros en situaciones vejatorias y distribuyen las imágenes a otros móviles e, incluso, cuelgan las escenas en Internet. «La última moda en bromas de adolescentes es grabar al profesor, alterar su imagen por ordenador, y colgarlo en Internet para burla de toda la clase», dice un docente de un instituto vizcaíno.

Educación ha suprimido de la normativa las expresiones falta o infracción y las ha sustituido por conducta 'inadecuada', 'contraria a la convivencia' en el centro y que 'perjudica gravemente la convivencia'. Grabar con móviles y difundir imágenes son consideradas como las acciones de mayor gravedad, a la misma altura de las agresiones. El nuevo decreto establece sanciones para ellas que pueden llegar hasta la expulsión temporal o el traslado de matrícula a otro colegio.

Llevar a la escuela equipos, materiales o aparatos prohibidos sin permiso expreso está calificado como falta leve. Las direcciones de las escuelas tendrán, de ese modo, una herramienta 'legal' para impedir que los estudiantes usen móviles o aparatos de música en el aula, y sancionar a los escolares que incumplan esa norma.

Leído en EL CORREO